El Juego del Palo Canario
El juego del palo canario es un duelo amistoso con palos entre dos jugadores que intentan golpearse y a la vez esquivar los golpes de su contrincante, evitando que el palo impacte en su cuerpo. Los jugadores del juego del palo generalmente utilizan la misma clase de pericias que determinan un estilo de juego tradicional. Pero una vez en acción las cambian en función de lo que aprecien oportuno para conseguir una ventaja con respecto al otro jugador.
El origen del juego del palo canario proviene de las peleas y juegos con palos de los aborígenes canarios. En la actualidad tiene un sentido de lúdico de juego y ha perdido ese carácter de lucha con el que se origino. El palo canario es un juego tradicional porque se ha divulgado de generación en generación con muy poco variación.
El juego tradicional del palo canario tiene tres modalidades que las podemos diferenciar por el tamaño del palo. Y dentro de estas modalidades distinguimos varios estilos que corresponden con los nombres de las familias que los conservaron y transmitieron hasta la fecha actual.
Las modalidades del
juego del palo son:
El palo grande: Estos
palos suelen ser mayores que una persona y tenemos varios ejemplos como el
Juego del Garrote en la isla de Gran Canaria, o el Juego de la Lata en la isla de
Fuerteventura.
El Palo Medio o Vara: Aquí
el juego del palo se lleva a cabo con palos de menor tamaño. Se suele jugar con
palos de tamaño comprendido entre el mentón y la cintura. Esto son reglas de
este juego tradicional del palo.
El Palo Chico o corto:
se utilizan palos de menor tamaño, se eligen palos cortos por debajo de la
cintura que se utilizan con una sola mano. Esta modalidad es no es muy
practicada actualmente.
Los estilos de juego
tradicional del palo como ya dijimos se corresponden a los nombres de las
personas que los conservaron. Entre ellos tenemos el Déniz, jugado en las islas
de Tenerife, Gran Canaria, Fuerteventura y la Palma. El estilo
Morales, el Verga, el Acosta, jugados en la isla de Tenerife. El Quintero
Zamora, en la isla del Hierro; el Garafiano, en la isla de la Palma ; el Conejero, en la
isla de Lanzarote.